...el camino que lleva de vuelta a casa...

...érase una vez una habitación. Azul. Allí vivieron, murieron, crecieron y se cumplieron muchos sueños, promesas y deseos. La habitación azul es ese lugar que tenemos todos en alguna parte del mundo para escondernos, para escribir, para sentir o dejar de sentir, para recordar, para olvidar... y para volver a soñarlo todo...

...érase que un día, un rayo de luz alcanzó la habitación inundándola de nuevos colores, arrancando algún misterio, descubriendo nuevos rincones e iluminándolo todo. Aquella habitación, azul, que era y es de color azul, con tanta luz, pasó por un momento a ser de un color nuevo, casi mágico, que sólo me atrevo a describir como Ultravioleta. Este blog es el recuerdo de aquel momento, la suma de todos esos momentos... sed bienvenidos...

11 de septiembre de 2010

El que se confía...

En el fútbol como en la vida, los dioses nos muestran lecciones que podemos aplicarnos a nosotros mismos. Y no quiero ser trascendental, porque es sólo uno de los goles más tontos que yo jamás haya visto. Vedlo os guste o no el fútbol.
A mí lo que de verdad me impresiona es la cara de satisfacción con la que se va el portero, poco sabedor de que está entrando en la historia del fútbol y que será visto por medio mundo.

8 de septiembre de 2010

300 años de Feria de Albacete.



¡Pues si! por fin ha llegado. Ayer 7 de Septiembre, como cada año, se abría el portón principal como símbolo de que el desmadre y la fiesta reinarán en Albacete durante 12 días (un fin de semana más de lo habitual).

Para los que somos de Albacete poco hay que decir. Hablar de la Feria para un albaceteño implica un ejercicio de viajes en el pasado por la mente en el que se suceden gentes, momentos y miles de historias y anécdotas. ¡Y las mejores son las que nunca se recuerdan!

Para los que son de fuera y no la conocen, o la conocen muy poco daré un par de datos que sorprenderán seguro:
- Albacete tiene una de las únicas 3 ferias consideradas de interés turístico internacional en España (junto a la de Sevilla y Jérez) y no es broma, lo podéis comprobar donde sea.
- Tenemos además el recinto ferial de obra más grande de Europa.
- En feria se dice que se quintuplica la población de Albacete de 185.000 habitantes durante el fin de semana.
- Y por último, en un par de encuestas de medios nacionales por internet, la Feria de Albacete quedó como mejor fiesta de España por encima de otras mucho más conocidas, como las Fallas o Sanfermín (esas cosas son subjetivas, pero ahí quedan).

Pero no quiero tirarme el moco desde aquí. Lo mejor es comprobarlo: ¡Id allí, que quien prueba repite! Ése sí es el mejor dato.

Os dejo un par de fotos: Un dibujo de Kukuxumusu que ha realizado una camiseta especial para este tercer centenario.



Y una de una botella de Mahou, que también ha sacado una edición especial. ¡La echo de menos! ¡Feria espérame!


7 de septiembre de 2010

Buceando en el mar y en la vida


Podría calificar mi último fin de semana como de absolutamente perfecto.
Me fui a uno de los lugares más bellos que conozco: la cala de la Granadella, cerca de Jávea, un lugar de difícil acceso y de una tranquilidad que enamora. Una cala pequeñita en la que se puede estar solo por las noches viendo las estrellas y escuchando el mar. Estando allí, siempre me ha parecido increíble que lugares así todavía existan. Además, allí he vivido muchos de los momentos más inolvidables de mi historia reciente.
Completaba tanta alegría una compañía inmejorable de seres amados y añorados. Reí con ellos, les hablé desde el corazón y les escuché con ansia, les abracé alrededor de unas ascuas que anunciaban parrillada de carne, cantamos juntos al gran Calamaro al calor de nuestra amistad y de alguna copilla de ron y apoveché el tiempo al máximo.
Además de cantar y beber, disfrutamos muchísimo del lugar y de sus aguas. Montamos en kayak hasta quedar casi exhaustos (yo al menos sí), dimos paseos por la costa en barca, buceamos entre peces que parecen cariñosos y encontramos una estrella de mar (Miguel, ¿quien si no? que es quien bucea de verdad), también nos tiramos al vacío desde algunos metros de altura (experiencia que acojona y emociona igualmente, y que todo el mundo debería probar) y jugamos al ajedrez a la orilla del agua. Yo, que soy de secano y nado malamente, no puedo pedir más.

Querría contaros más cosas: hablaros de mis amigos y de lo mucho que los quiero, querría contaros que volví lleno de energía y os explicaría cuales fueron mis momentos más felices allí, pero se me amontonan las ideas, y por hoy, he contado bastante. Otro día un poquito más.

La foto de este post en en verdad de la cala de la Granadella, en la que hoy, por cierto, se encuentra Bruce Willis rodando escenas en el agua y persecuciones en la pequeñita carretera entre bosques que es el único acceso a este lugar mágico.